El vaiven del agua junta el pasado y el presente (privado)

Primavera, era una estacion que él no apreciaba mucho. Chris siempre se habia llevado mejor con el otoño. Le gustaba ver como las hojas de los arboles iban cambiando de color...el aire medio humedo, eran algo que le encantaba.

Se habia puesto unas zapatillas negras, un vaquero medio desgastado y una camisa negra, con los bordes blancos y los primeros botones abiertos, dejando al descubierto una cadena de oro muy importante para él. El llevar el cabello medio revuelto, onda como si nada le interesara en el mundo le daba el toque adolescente que tanto problema le traia.

Habia dejado la moto aparcada a unos metros. Ahora solo se dedicaba a caminar, dejando que la arena se entrara en sus zapatillas. Alzo la mirada, viendo la luna hermosa que lo alumbraba. Amaba la noche sobre todas las cosas, era donde él mejor podia inspirarse.

Sus pasos eran lentos pero decididos, no sabia porque habia ido a la playa de noche. Lo unico que podia decir era que tenia un presentimiento, como si algo bueno le iba a ocurrir en ese lugar.

LLego a una roca grande y se subio a ella. Una vez acomodado, su mente comenzo a volar, viejos recuerdos se adentraron en su presente. Se sentia muy melancolico, un dolor peculiar se habia instalado en su pecho desde el dia que habia visto a Rachel.

-¿algun dia te entendere?-esa pregunta se la llevo el viento. Él realmente la queria y en ese entonces su objetivo era cuidarla, lo unico que ella jamas lo vio. Su mano izquierda tanteo su bolsillo, sacando su billetera. De un compartimiento medio oculto saco una nota y una cadenita con un dije en forma de clave de sol.- solo una nota...nada mas que eso... y esta cadenita que jamas te pude dar...

La habia comprado el dia que ella habia huido, desde ese entonces, la nota que ella le habia dejado y esa cadenita lo habian acompañado noche y dia.

Aquella noche habían tocado en un pequeño garito cercano a la playa. Tras la actuación, todo el grupo había ido allí para celebrar cerveza en mano, el éxito que habían tenido. El público había disfrutado, y el dueño les había pagado más de lo previsto, y además les había contratado para otra actuación dentro de un mes.

Todos estaban eufóricos y cantaban y gritaban alborotando la tranquilidad del lugar. Todos.....menos Rachel. Ella había estado muy callada, demasiado para lo habitual en ella. No es que fuera especialmente habladora, pero el silencio que habian mantenido sus labios, no había pasado desapercibido para nadie del grupo. Ella miraba al resto del grupo, siguiéndolos a cierta distancia, mientras su mente viajaba a unos días atrás, donde parte de su pasado había ido a hacerla una visita. Desde entonces, el comportamiento de ella había variado. Una de las chicas del grupo hizo una señal al resto para que siguieran, y se quedó parada esperando a que Rachel la alcanzara. Cuando llegó a su altura, está posó una mano sobre su hombro.

-Rachel, el resto de la banda y yo, vamos a ir a un local del centro, al Varonian. Francois tiene unos vales de bebida, y pensamos pasar allí el resto de la noche.. o quizá vayamos luego a una discoteca.. te apuntas?
La muchacha negó con la cabeza.- No.. no me apetece.. ir vosotros.. yo voy a quedarme un rato más aquí... y luego me iré a casa.
La otra chica hizo un gesto de resignación, y miró a Rachel con cierta preocupación.- Rachel... qué es lo que te pasa últimamente? nos tienes preocupados..estás más seria de lo normal, y ya no sales con nosotros después de las actuaciones..

Rachel la miró fijamente.- Estoy aquí, no?
-Si, bueno, tu ya me entiendes... además hoy fuiste especialmente desagradable con el chico que quería invitarte a una copa después de la actuación.. al menos podías haberle dicho que no, más amigablemente..
-Mira, Justine, ya te lo he dicho antes.. no me pasa nada.. sólo es que estoy muy estresada..y necesito relajarme, eso es todo. Marcharos y pasáoslo bien.. yo prefiero quedarme aquí.
-Está bien...pero...no vayas a hacer ninguna tontería... vale? Rachel... me preocupas..

La muchacha esbozó una leve sonrisa y dió un empujoncito a Justine, para que esta se reuniera con los demás. El grupo se alejó de la playa, dejándola de nuevo en un remanso de paz y silencio. Rachel se descalzó y avanzó con paso lento por la arena, hasta llegar justo delante de una roca, donde se paró y avanzó despacio hasta la orilla, adentrándose levemente en el agua. Sus ajustados vaqueros, se mojaron a la altura de los tobillos, y la fresca brisa marina, hizo que Rachel extrañara haber dejado su cazadora tejana en el portaequipaje de su moto, justo enfrente del local donde habían tocado. El pequeño top negro que llevaba, dejando al descubierto los hombros y la cintura, no abrigaba demasiado, pero aún así no se movió. Con aire pensativo, triste quizá, se quedó contemplando el agua.

Le encantaba contemplar el agua, le resultaba relajante. Chapoteó con los pies en ella, tal cómo solía hacer de niña. Aunque no hiciera buen tiempo, a ella le gustaba chapotear en la orilla. Aunque normalmente no estaba sola. Aquellos recuerdos de su niñez, hicieron, que un nombre acudiera a sus labios, pronunciándolo suavemente, con nostalgia, y quizá algo de anhelo. Tal vez por un tiempo feliz para ella y que había quedado atrás, o tal vez porque la visita inesperada del muchacho, la había traido otro tipo de recuerdos, y quizá algo más...- Chris....- El nombre viajó entre la brisa, meciéndose con suavidad y perdiéndose en el murmullo de las pequeñas olas que rompían en la orilla....

Coloco el brazo izquierdo tras su nuca, usandolo como almohada para recostarse en la roca. Con la mano libre levanto la cadenita al cielo, intentando que la clave del sol se camuflara en la noche.

Desde que se habia ido de Inglaterra, muchas cosas le habian pasado. En realidad nunca pasaba mucho tiempo en un lugar, por el tema de sus giras, sus presentaciones, pero siempre volvia al lugar de su nacimiento. Todos lo conocian ahi, pero él no conocia a nadie.

Nunca le habia gustado los "beneficios" de ser conocido, las fiesta de alto nivel, solo para gente exclusiva no era lo suyo. Desde la muerte de sus padres, él habia quedado muy solo. No sabia lo que era el cariño sincero, todo el que se le acercaba poseia intensiones ocultas.

La unica persona que habia conocido que lo apreciaba por quien era y no por ser el hijo "de" habia huido de él. Rachel lo habia dejado solo. Chris nunca entendio eso y por eso muchas veces creia que la culpa era exclusivamente de él.

Cerro los ojos con fuerza, odiaba sentir ese dolor en el pecho, ese "algo" que le prohibia respirar bien. Bufo cansado, por ahi necesitaba irse de Japon, volver a su antigua vida. Cuando cantaba de olvidaba de todo y todos.

-deberia dejar de pensar...- murmuro. En medio del silencio que lo rodeaba, pudo oir su nombre, en un leve susurro como si el viento lo hubiera llevado a sus oidos- creo que me estoy volviendo loco...escucho su voz en todas partes....

Deberia ir a tratarse, esa muchacha lo estaba afectando demasiado. Nego con la cabeza, lo unico que lo relajaba era la musica, asi que sin pensarlo comenzo a cantar, con voz suave.

Era una melodia melancolica, la letra inundaba al corazon de tristeza, era su tristeza...la estaba dejando salir en forma de una cancion, solo para liberarse de algunas cadenas.

La abstraida mente de la muchacha, seguía perdida en los recuerdos de su pasado, cuando la brisa trajo hasta ella algo que la trajo de nuevo a la realidad.. alguien estaba.....¿cantando? Se giró sobre si misma, volviéndose hacia la roca que estaba tras de ella. La voz parecía provenir de aquella parte.. una voz masculina..ella había pensado que estaba sola, pero al parecer no era así. Aquella voz sonaba triste y llena de melancolía, era una tristeza que resultaba palpable, casí podía sentirla cómo suya.. tal vez porque ella se sentía nostálgica en ese momento, y por ello era cómo si aquella canción le afectara.

Con curiosidad fué acercándose a aquella roca. A medida que iba avanzando, la voz se iba haciendo más nítida, lo que corroboraba que en efecto, quien fuera que estuviera cantando, se encontraba allí situado. Pero lo más desconcertante, era que aquella voz le era muy familiar.. pero sería demasiada coincidencia..sería realmente él..?

Una parte de ella, pensó que lo mejor sería marcharse de allí y dejar a quien fuera con su pena, y ella seguir con su melancolía cómo si nada, pero...la otra parte no obedecía y seguía avanzando, rodeando la roca para poder llegar a la parte superior. Era cómo si aquella canción la hubiera hipnotizado. Quizá porque en el fondo esperaba que fuera él...

Cuando llegó a la parte de arriba de la roca, pudo verle recostado. Parecía que sostenía algo en la mano, pero cómo estaba algo oscuro, sólo pudo ver que era algo brillante, que era lo que la luz del astro lunar permitía distinguir. No podía ver al detalle su figura, pero la luna iluminaba lo suficiente cómo para que no hubiera confusión al respecto de su identidad. No obstante, y cómo si quisiera cerciorarse, preguntó, a pesar que sabía que la respuesta sería afirmativa. -¿Chris...?, ¿eres tú...? ¿qué haces aquí a estas horas?- Su tono no era de reproche, si no más bien de curiosidad, aunque lo cierto era que esa misma pregunta podrían hacérsela a ella..

Lo mejor que le salia en su vida era plasmar sus sentimientos en canciones. Las letras de él abarcaban desde la melancolia, pasando por el amor hasta llegar a la rabia. Él simplemente dejaba salir sus sentimientos en sus canciones.

Asi que ahi estaba, una vez mas plasmando todo su dolor en una melodia melancolica, con una letra dolorosa. El sufrimiento de él se podia palpar facilmente. Era su modo de escape, era la unica forma de la cual él podia respirar mas tranquilo luego de todo el sufrimiento que lo abrumaba.

La brisa removio sus cabellos e hizo que el colgante bailara unas notas invisibles. El clima que se estaba formando entorno a él era perfecto, pero como lo perfecto no estaba permitido en la tierra, alguien rompio el hechizo en el cual él estaba sumergido.

Sus ojos se abrieron derepente, la tranquilidad que lo estaba inundando desaparecio sin dejar rastro. Sus facciones antes suaves se tensaron levemente al reconocer la dueña de aquella voz.

Con sumo cuidado guardo el colgante en su bolsillo. Uso su brazo derecho como soporte y se giro hacia ella, para verla completamente o por lo menos lo que la luz de la luna le permitia

-si, soy yo Rachel- respondio con tranquilidad. -eso mismo te podria pregunta yo, ¿no lo crees? -contrataco riendo. Se sento, viendola mejor, notando por fin que se encontraba con ropa muy reveladora en la parte superior de su cuerpo. -te enfermaras... -sin decir mas le dio su campera para que ella se abrigara.

En realidad, ademas de querer cuidarla, lo ponia incomodo esa vestimenta, ya era una lucha pelear contra lo que le producia la personalidad de ella en él, como para tambien pelear contra el perfecto fisico de ella.

Se reto mentalmente por ser tan debil ante la presencia de ella, pero como buen actor que era, no dejo que sus sentimientos vieran la luz.

-te dije que nos volveriamos a ver....-pronuncio mientras se bajaba de la piedra y quedaba cerca de ella- pero jamas crei que fuera tan pronto...- termino diciendo con cierta dulzura.

-La verdad es que yo tampoco..- contestó ella con tono cálido mientras se ponía la campera del muchacho, percibiendo el agradable aroma que de él guardaba y que ahora podía sentir cómo lo envolvía a ella. -Me sorprendió mucho verte en la cafetería, yo te hacía en...... bueno.. no esperaba que estuvieras aquí en versailles..- hizo una pequeña pausa, y luego continuó. Se acababa de dar cuenta que no le había dado las gracias por dejarle la campera.-ah.por cierto.. gracias por la campera.. he cometido la estupidez de dejarme mi cazadora en la moto..

Un silencio incómodo comenzaba a planear entre ambos, y eso no era bueno para ella. Odiaba ese tipo de situaciones porque la hacían sentirse estúpida, mas justo cuando había estado dándole vueltas en su casa acerca de que decirle si se volvieran a ver. Pensó en decirle muchas cosas, pero sobre todo, había tomado la firme intención de pedirle disculpas. El modo en que se fué, probablemente era el culpable de aquella incómoda situación que se comenzaba a crear, y en aquel momento fué el mejor modo que encontró para despedirse de él, sin poner en riesgo la firmeza de su decisión. -Estaba dando una vuelta..estoy en un grupo cómo batería..cómo ves no has sido el único que se ha decantado por el mundo artístico- Puntualizó antes de continuar- hemos tenido una pequeña actuación en un local cercano, y me apeteció dar un pequeño paseo..- La muchacha miró brevemente hacia el mar, para luego volver el rostro hacia él con expresión melancólica.- Este lugar me hizo pensar en nuestra infancia... lo pasábamos muy bien, ¿verdad? fué un tiempo muy especial. - Suspiró de modo sentido. Recordar aquello, había hecho que también se diera cuenta de cómo extrañaba aquella complicidad que había entre ellos y lo bien que se sentía cuando estaban juntos....Pensó que sería bonito recuperar parte de aquello, aunque no sabía si sería posible, siete años era mucho tiempo y no estaba segura de que él siguiera considerandola o quisiera considerarla tan siquiera una amiga, a fin de cuentas, ella se marchó de aquel modo.. probablemente habían pasado muchas cosas, quizá demasiadas. Seguramente ninguno de los dos era ya el de antes..

La muchacha volvió a suspirar. Pedir disculpas era más dificil de lo que había pensado, y más cuando había pasado tanto tiempo, y no sabía cual podría ser la reacción del muchacho. aunque no creia que la pudiera guardar más rencor, quizá del que pudiera guardarla por aquello, cosa que no podría reprocharle de ser así. Tragó un poco de saliva, y poniendo gesto serio, comenzó a hablar.- Chris...yo...quería...me gustaría pedirte disculpas...- comenzó de forma algo titubeante, pero sus palabras estaban llenas de sinceridad. Ella no solía decir las cosas si no las sentía.-tienes derecho a estar enfadado.. así que no te culpo si no quieres volver a saber nada de mí...no te merecías que me marchara dejándote sólo aquella nota.. pero... entonces era lo único que podía hacer...- No se encontraba preparada para decirle adiós personalmente. Si lo hubiera hecho, probablemente, él hubiera intentado detenerla y hacerle cambiar de opinión, y ella se habría dejado convencer, llevada por los sentimientos que tenía y que intentaba ocultar y ahogar a toda costa, para no sufrir la suerte que su amiga y que tantas otras que había conocido a lo largo de esos siete años y que no hacían sino corroborar que el único modo de mantener el corazón a salvo, era no entregarlo nunca, aunque llevaba tiempo sospechando que quizá aquel método no funcionaba bien del todo, o quizá era que cuando ella decidió ponerlo en práctica ya había sido demasiado tarde, a pesar de que pensaba que lo tenía todo muy claro. Entonces así era. Luego no estuvo tan segura de ello, aunque el pasar de los años le habian devuelto la convicción.

Ahora no podría decirlo con certeza. El miedo seguía estando ahí... quizá necesitaba más tiempo, o algo más para superarlo, pero no quería que volviera a convertirse en un obstáculo entre ella y Chris. Que al menos aquella amistad, si no volvía a ser la de antes, por lo menos fuera sin rencores y sin reproches.. al menos eso... era a lo único que aspiraba..

Giro la cabeza, mirando las olas del mar, intentando borrar la hermosa imagen de ella con su campera. ¡Demonios!se sentia como un adolescente. Sonrio con ironia, que cruel era el destino a veces.

-para mi tambien fue una sorpresa encontrarte...fue algo increible...- sonrio sinceramente. Un brillo de tristeza desprendia su mirada, él se sentia un poco incomodo, en realidad no sabia como comportarse con ella. - no te preocupes, no me gustaria que te enfermes...

Se concentro nuevamente en el mar. Silencio, eso era lo que reinaba entre ellos y no uno de esos que él tanto apreciaba, sino era ese silencio incomodo, uno que nunca creyo que podia instalarse entre ellos. Él estaba metido en sus pensamientos, en intentar responder preguntas que ni él comprendia. La voz de ella llego a sus oidos, asi que volvio a instalar la mirada en Rachel.

-me alegra saber eso...espero tener el honor de escucharte algun dia...-pronuncio con alegria. Realmente se alegraba al oir los logros de Rachel, por un instante la imagino tocando e hizo que su corazon se llenara de gozo. Copio la accion de ella y miro por unos segundos el mar - fueron buenos tiempos...uno de mis mejores recuerdos... -en realidad todo lo que tuviera relacion con ella, para él eran buenos recuerdos.

Él la siguio observando, notando como sus expresiones iban cambiando a medida que transcurria los segundos. No importo el tiempo que habia pasado, él todavia podia darse cuenta cuando ella se encontraba nerviosa y en ese preciso instante, Rachel estaba en una lucha interna.

Se le hizo un nudo en el estomago, un leve presentimiento lo invadio, como si lo que ella fuera a decir ya supiera que no le gustaria. Se apoyo mejor en la roca y espero lo inevitable. Su mirada se oscurecio cuando la escucho hablar. A medida que las palabras iban saliendo de la boca de ella, el rostro de Chris se iba tornando sombrio. El pasado ya lo habia alcanzado y atrapado en una nube gris de melancolia.

Una vez que ella pronuncio la ultima palabra, se produjo un nuevo silencio. Él se le quedo mirando, como intentando encontrar las palabras justas, pero en realidad, todavia no habia asimilado todo lo que ella le habia dicho. ¿Que responderle? claro que la perdonaba, inclusive jamas estuvo enojado, no con ella...

-¿sabes? nunca entendi porque te fuiste...en realidad, siempre crei que la culpa fue mia.... -comenzo hablar. Su mirada se lleno de dolor y su voz se torno mas suave- siendote sincero, jamas me pude enojar contigo...siempre tuve la esperanza que volverias, tarde o temprano... creo que el cariño que te tenia fue mas fuerte que tu abandono... - luego de haber pronunciado las palabras, noto que habia hablado en pasado y se arrepintio- el cariño que te tengo sigue siendo muy grande y fuerte... - acomodo.

Metio la mano en su bolsillo, sacando la cadenita que guardaba desde su partida. Con la sonrisa mas bella que él le podia regalar, toma la mano de ella, depositando el objeto en su palma.

-esto lo he guardado desde el ultimo dia que te vi....lo conserve con la esperanza que te volveria a ver y asi te lo regalaria... -sonrio. Sin poder evitarlo mas, dejo la formalidad y tiro del brazo de ella, haciendo que la cabeza de Rachel se apegara a su pecho. - por favor, permitime estar a tu lado....por lo menos como amigo...

Rachel le miró con cierta incertidumbre. Deseaba que él no le guardara rencor por aquello, pero no esperaba que le siguiera guardando tanto cariño cómo el decía, después de todo, era un hombre, y los hombres olvidaban fácilmente a las mujeres. Lo había visto muchas veces, quizá demasiadas.. cuantas noches no había escuchado llorar a Justine tras un concierto al haber descubierto a alguno de los que por entonces tenían el 'cargo' de novios, 'demostrando' todo lo que la quería, acostándose con otra, o 'conversando intimamente' de un modo que probablemente ya quisieran muchos de los que presumen de ser grandes besadores.

Sin embargo, cuando él depositó aquella cadena sobre la palma de su mano, tuvo sus dudas.. realmente había conservado aquel colgante todo ese tiempo?. Ella siempre le había guardado un especial y gran cariño, muy a su pesar suyo, pero ella era una mujer, las mujeres se diferenciaban de los hombres en eso, sin embargo ahora, ya no estaba tan segura. Uno de los pilares en los que se basaba su teoría, acaba de derrumbarse estrepitósamente.

Pero lo más desconcertante para ella, fué cuando antes de que ella pudiera reaccionar por lo del colgante, Chris la atrajo hacia sí, haciendo que su cabeza reposara en su pecho. El aroma de él, la envolvía ahora por completo, entre la campera y el perfume que desprendía de la ropa que él llevaba puesta. Se quedó quieta unos segundos, sin saber muy bien cómo reaccionar. De pronto recordó una de las razones por las que se había marchado, y era lo que estar con él la hacía sentir, y de lo peligroso que eso resultaba para su filosofía de aquel tipo de cosas, pero también recordó que precisamente aquello era una de las razones por las que no quiso marcharse, si bien al final pudo quizá más su miedo a salir herida, sobre todo al enterarse del trágico final de su amiga. De hecho había estado dudando hasta que aquella noticia inclinó la balanza hacia la decisión de huir.

Tras el primer momento de incertidumbre, Rachel extendió los brazos, y rodeó con ellos suavemente la cintura del muchacho, sin apretar, manteniéndose en aquella posición, cómo si el hecho de moverse, fuera a romper el 'hechizo' o fuera a hacer que se sintiera tentada a abrazarle con más efusividad, y no estaba preparada en ese momento para hacerlo sin que ello causara la rotura de aquella coraza que tanto trabajo la había costado construir alrededor de su corazón, pero por otro lado, no quería volver a perder a Chris, por lo que optó por posar sus brazos, más que abrazarle.

No era muy expresivo quizá, pero era un comienzo. Estaba demasiado aturdida por toda la información que debía asimilar y replantear, y por lo inesperado de ese gesto del muchacho. Aquello significaba que Rachel estaba dispuesta a dejarle estar a su lado, cómo amigo al menos. No es que hubiera cambiado de opinión con respecto a los hombres, aunque quizá ya no estaba tan segura cómo al principio, pero el haber recuperado a un viejo amigo, lograr su perdón, hizo que se sintiera más cálida que lo acostumbrado en los últimos dos años, aunque tuviera que esforzarse en no demostrar lo que aquello suponía para ella. El hacerlo sería más nefasto que beneficioso, pues supondría dejar al descubierto una debilidad que no quería revelar.

Significaría probablemente dejar su corazón al descubierto, e indefenso, por lo que tendría que mantenerse firme en sus convicciones, si bien en lo más hondo de sí misma se preguntaba si sería capaz, y al final no terminaría sucumbiendo, y dejándose llevar, aún a sabiendas de que su corazón resultaría herido, y probablemente no lo soportaría, pero por el momento decidió no plantearse esa cuestión. Dejaría el asunto para el día siguiente, cuando hubiera tenido tiempo para pensar todo más tranquilamente. Ahora, acababa de recuperar algo que añoraba hacía tiempo aunque se hubiera resistido a reconocerlo porque quizá tenía miedo de hacerlo, y eso hacía que no pudiera ocultar que se sentía feliz, aunque lo demostrara de un modo sosegado.

La muchacha se separó con delicadeza de él, aunque no demasiado. Sonrió levemente, mirándole a los ojos con expresión cálida.- nunca he dejado de considerarte mi amigo.. sólo era que no estaba segura que tú quisieras seguir siéndolo después de marcharme así..pero me alegra saber no ha sido así.. aunque...- abrió la palma de su mano donde tenía el colgante que acababa de darle.- no me esperaba esto... de verdad lo has tenido guardado todo este tiempo..? realmente...yo...no se que decir... es..muy bonito..pero.. no tendrías que haberlo comprado.. no recuerdo que fuera mi cumpleaños... y después de lo que te hice..no creo que lo merezca...- Su voz se tornó triste por un segundo mientras miraba con atención la cadena. La visión de aquel colgante hizo que por un instante recordara lo mal que se había sentido por haberse ido de aquel modo, y la dejó con la idea que tendría que compensarle de algún modo por aquello. Luego su expresión cambió, y una leve sonrisa acompañó su siguiente gesto. Extendió la mano ofreciendo de nuevo el colgante a Chris, abriendo la palma de su mano y depositándolo en ella- pero aunque no me sienta merecedora de él.. te importaría ponérmelo.? -preguntó dándose la vuelta y despejando su cabello de la nuca, dejando esta expuesta, para que Chris pudiera colocárselo y abrocharlo.- cómo compensación en parte por todo este tiempo que lo has tenido, prometo llevarlo siempre puesto.. cómo si fuera mi amuleto..pero sigo sin comprender, porque me lo compraste...no tenías que haberte tomado ninguna molestia...

No habia pensado. En realidad solo se habia dejado llevar por el deseo de tenerla entre sus brazos, pero ya no habia marcha atras, asi que se dedico a disfrutar. La atrajo mas hacia su pecho, aspirando el aroma de ella, dejando envolver por los recuerdos.

Al ser mas alto, pudo colocar el mento delicadamente sobre la cabeza de ella. Cerro los ojos y sonrio, como hace años no lo hacia. No lo podia creer, luego de tantos años, la tenia ahi, con él, entre sus brazos...tenia miedo de abrir los ojos y que todo fuera un sueño.

Ninguno de los dos decia nada, cada uno estaba metido en sus recuerdos. ¿Que estaria pensando ella? no lo sabia, lo unico claro que tenia él era que se sentia perfecto tenerla asi de cerca. Ella encajaba justo en sus brazos, parecia que habian sido hechos uno para el otro.

A regaña dientes dejo que ella se separara un poco de él, escuchando sus palabras. Sonrio con energia, siempre ella buscaba el porque de las cosas.

-claro, ha sido mi amuleto todos estos años... -respondio con sinceridad. Observo por un segundo el colgante y sonrio nuevamente- no lo compre con ningun objetivo, simplemente que cuando lo vi en ese entonces, me hizo pensar en vos...asi que lo compre... - con su mano libre abrio los primeros botones de su camisa, sacando un colgante igual al de ella, solamente que con la cadena mas gruesa - este es el mio...

Vio los cambio de expresion en el rostro de ella, hasta que por ultimo Rachel le devolvio el colgante. Èl la miro sin entender, pero cualquier duda que se le habia formado en ese lapso habia sido disipada por las palabras de ella.

Con los nervios a flor de piel, paso el colgante por la cabeza de ella, depositandolo suavemente en el pecho.Aunque las manos le temblaban levemente pudo colocarle el colgante a la perfeccion.


-te queda hermoso...-pronuncio sin poder creer que luego de tantos años, ese colgante estuviera con su verdadero dueño. Como si recordara algo de pronto, saco su billetera y de un compartimiento saco una tarjeta pequeña, el papel se encontraba medio arrugado y habia perdido el color por los años. -esto iba con el colgante... - en el papel decia "Para la unica persona que me comprende...te quiero mucho... Crhis..." con la letra de él.

Rachel agarró el colgante observándolo con aire pensativo mientras Chris terminaba de abrocharlo. Tantos años guardando aquel colgante..
De modo automático, sin darse cuenta, Esbozó una leve sonrisa tierna, cómo si estuviera acordándose de algo..tal vez porque aquello hizo que regresara a su adolescencia, en cómo se sentía ella entonces cuando estaban juntos, antes de que aquél trágico suceso cambiara su modo de pensar, haciéndola tomar una decisión que desembocó en su 'huida' , y en cómo ahora aquella sensación parecía haberse perpetuado en el tiempo, pasando por alto la larga ausencia de ella. Ahora estaban allí, y el la estaba abrochando una cadena que se suponía le iba a haber dado ocho años atrás, y que había guardado cuidadosamente, al parecer.

Cuando tras haberle abrochado la cadena, Chris sacó una pequeña tarjeta que también había conservado todo este tiempo y se la entregó, Rachel enmudeció tras leer con atención lo que en ella ponía. leyó una y otra vez la tarjeta, cómo si quisiera cerciorarse que estaba leyendo bien. Temblorosa, tuvo que llevarse la mano derecha al rostro, tapándose la boca con ella, mientras con la otra sostenía la pequeña tarjeta manuscrita. Aquellas palabras fueron otro duro golpe a sus convicciones. Si el que guardara la cadena la había dejado en cierto modo, 'tocada' el que hiciera lo mismo con la tarjeta, hizo que se preguntase si quizá su postura no era equivocada. En el fondo sabía la respuesta, siempre la había sabido, pero sus convicciones se sostenían con fortaleza. Sin embargo ahora, con sólo dos gestos, había hecho tambalear su teoría. Necesitaba encontrar urgentemente algo que volviera a dar razón a sus hipótesis. No se esperaba algo cómo eso, y menos después de tanto tiempo, por lo que su guardia estaba baja. Ese fué su error.

No pudo evitar preguntarse que hubiera sucedido, si en lugar de la nota, hubiera ido personalmente a despedirse.. si no se hubiera enterado del trágico final de su amiga, de la cúal ella sabía la causa porque un mes antes ella le había contado algo que fué lo que comenzó a hacerla dudar de la fidelidad de los hombres. ¿Qué hubiera pasado entonces.. ? ¿qué hubiera sucedido si en ese momento Chris le hubiera entregado la cadena y esa nota?

Rachel sintió cómo el miedo la invadía. Miedo de que su coraza se resquebrajara en mil pedazos y no la salvara esta vez. Cómo entonces, quiso huir, pero sus piernas no la obedecían. Entonces pudo marcharse porque Chris no estaba, pero ahora, él se encontraba ahí, junto a ella, y le había dado una tarjeta cuyo contenido había trastocado todo su equilibrio.

por qué ahora? por qué guardaba esa tarjeta.. y por qué se la daba? podía haberla tirado, hacerla pedacitos, después de todo.. ella se había ido..y no había modo de saber si se iban a volver a encontrar..

La mente de Rachel se hacía preguntas, puede que buscando excusas para no derrumbarse y mostrar lo que aquella nota le había afectado. Más de lo que jamás siquiera podía haber imaginado, pero eso era algo que no podía permitirse. Era una lucha interna consigo misma, un conflicto entre lo que su corazón sentía, y lo que su mente le aconsejaba. Hasta ahora no había tenido problemas.. por qué de pronto todo parecía haber cambiado? Se sentía débil y vulnerable, y ella odiaba sentirse así. Tenía que encontrar algo que volviera a darle fuerzas, antes que Chirs hiciera algún otro gesto que la doblegara por completo y la hiciera exponer lo que todo este tiempo había estado conservando bajo su coraza.

-...A la única persona que me comprende... te quiero mucho...- repitió quedamente las palabras con la voz ligeramente quebrada. - Por qué..?¿ por qué ahora?...después de tanto... ¿por qué no la rompiste..? -Su mente intentaba buscar comprender y buscar una explicación a aquel gesto, que no fuera lo que ella se estaba imaginando, porque de ser así no sabría si sería capaz de continuar manteniendo su coraza intacta.

Se llevo una mano a la nuca, girando un poco el cuello. Esta situacion si que lo ponia nervioso, por ende hacia que se contracturara entero.

Se concentro en la mirada perdida de ella, parecia que se encontraba en un laberinto y estaba intentado encontrar la salida con todas sus fuerzas.

Él podia notar como el porte seguro de Rachel habia desaparecido, dejando que la debilidad se apoderara de ella. Ante los ojos de él, parecia una niña indefensa, como si todas sus creencias hubieran sido derribadas por un viento feroz.

Chris no sabia que hacer, en realidad él se estaba mostrando tal cual era, estaba desnudando su alma por asi decirlo.

¿Por que habia guardado todo eso por tanto tiempo? En realidad, él tenia una pequeña esperanza, una luz en el medio de la oscuridad, de que tarde o temprano la iba a encontrar. No importaba los años o si ella ya tuviera su vida con alguien o en su caso, él....Chris se lo queria entregar, porque realmente habia sido y era una de las personas mas importantes para él.

Sonrio con dulzura al oir su pregunta, realmente Rachel se encontraba perdida.

-si rompia esta nota...si tiraba esta cadenita, era como romper contigo...como olvidar todo lo que vivimos alguna vez...y yo no estaba dispuesto a sacarte de mis recuerdos...-confeso con el corazon en la mano.- no podia hacer borron y cuenta nueva...no contigo...eras, sos y seras alguien muy especial en mi vida...y no estoy dispuesto a perderte de nuevo....- tomo las manos de ellas entre las suyas, llevandolas hacia sus labios, depositando asi un beso- tu mirada me dice que estas confundida....estoy dispuesto a esperarte y a respetarte...iremos a tu tiempo, no al mio....los dos sabemos lo que yo siento por ti...

Una idea vino a su mente, recordaba que cuando eran niños, él solia tirarla al mar, asi que copiando su accionar en el pasado, la atrajo y la alzo, corriendo al mar con ella acuestas.

-es hora de divertirnos ahora....- pronuncio al mismo tiempo que se metia junto a ella en el mar.

Rachel contuvo la respiración por un momento cuando Chris llevó sus manos a los labios de él y depositó un beso. Era una sensación cálida y agradable, pero procuró no dejarse llevar por ella, aunque eso no evitó que la disfrutara. Chris siempre había sido de gestos amables y caballerosos. Siempre lo había considerado todo un galán. De lo que no había duda, era que sabía cómo tratar o que decir a una mujer, aunque sus palabras se sentían sinceras.

Tras el primer momento de debilidad, frunció el ceño ligeramente. No porque estuviera enfadada con él, sino más bien consigo misma al notar cómo iba perdiendo fe en sus convicciones. Chris lo había vuelto a hacer. Cada uno de sus gestos, parecía ir encaminado a minar su teoría.. pero por lo que quizá se sentía algo molesta, era por esa seguridad con la que hablaba sobre la confusión que ella podía tener.. hablaba de esperarla y respetarla de ir al tiempo de ella..Cómo iba a saber él cómo se sentía en su interior..si estaba confusa o no.. eso quizá había sido algo arrogante por su parte....pero....

Rachel suspiró. Por muchas pegas que tratara de poner, sabía que llevaba razón, y eso quizá era lo que más rabia le daba.. ella llevaba años ocultando todo eso en su interior, y ahora, de pronto con su llegada, parecía querer salir a flote aún a costa romper una defensa que llevaba años construyendo, y que hasta ahora le había funcionado perfectamente, pero que por alguna razón, ahora parecía volverse contra ella.

Cuando Chris aseguró que ambos sabían lo que el sentía por ella, su mirada se ensombreció por un instante. Por supuesto que lo sabía. y eso era quizá lo que la asustaba, ¿Cómo podía reafirmar su teoría, sabiendo que el sentía lo mismo que ella pretendía esconder bajo aquella coraza para evitar que rompieran su corazón.? Con cualquier otro no hubiera dudado ni un instante, pero él no era cualquier otro.. era Chris, y eso complicaba las cosas.

La muchacha iba a decirle algo en réplica cuando se vió sorpresívamente alzada y transportada hacia el agua. Al adivinar sus intenciones, Rachel pataleó y trató de zafarse, siendo completamente inutil. Él era mucho más fuerte que ella. Tampoco sirvieron de nada sus protestas dirigidas a cómo quedaría su vestuario si se mojaba, aunque lo que más le preocupaba de lo que ella llevaba era la campera que él la había prestado. No quería que se arruinara.

El agua estaba templada, pero la brisa hacía que las partes que se habían mojado resultaran frías al quedar expuestas a ella.
Rachel le miró con gesto enfadado al principio. Ahora estaba empapada y pillaría un resfriado. En venganza, ella le salpicó, un par de veces.- Si me resfrío, será tu culpa.- dijo haciéndose la ofendida, y volviéndolo a salpicarle una tercera vez, aunque en esta ocasión, el gesto de enfado había sido sustituido por una leve sonrisa, al contemplarle a él también empapado. En ese momento era cómo si hubieran vuelto a su niñez,lo que le hizo recordar con cariño cuando solían jugar juntos y hacía lo mismo que acababa de hacer ahora.- no has cambiado nada...sigues siendo el mismo...- añadió entre risas con tono afectuoso dejando que la mueca de sus labios se ampliaba sonriendo más abiertamente.- esta me la pagas...- dijo cambiando su gesto ahora a una pequeña sonrisa maliciosa, a la par que trataba de desequilibrarle para hundirle la cabeza en el agua, a pesar que sabía que así no lograría nada.. él era más alto que ella, y además tenía más fuerza, así que tendría que hacer algo que le desconcertara, y Rachel sabía perfectamente que hacer para lograrlo.

Tal cómo solía hacer cuando eran más jóvenes, y jugaban de esta misma manera, Rachel acercó su rostro al de Chris, y sin previo aviso, depositó un pequeño beso en la mejilla. Procuró que no fuera demasiado cerca de los labios de él, para no sucumbir a la tentación de besarle en ellos. Su voluntad estaba tocada y no era prudente, aunque la verdad es que aquello tampoco lo era en demasía, probablemente estaba jugando con fuego, por eso procuró no extenderse demasiado en el beso. Sólo quería hacerle bajar la guardia para poder desquilibrarle. Normalmente eso siempre solía funcionar, al menos en el pasado, y ella solía aprovechar para hundir su cabeza en el agua y luego tomar distancia, invitándole a que la siguiera y la intentara atrapar. La diferencia estaba en que ahora no eran ya unos niños, pero en ese instante, Rachel se sentía cómo tal y se estaba divirtiendo cómo hacía años que no lo hacía. Ocho años para ser más exactos. Nada parecía haber cambiado. Allí estaban de nuevo, Chris, ella y el mar, reconstruyendo un trozo del pasado en el presente, y con un futuro incierto, pero tal vez con cierta esperanza de que las cosas puedan tomar un rumbo distinto al que habían seguido estos últimos años.