Tanto Tiempo....

Que dificil era enfrentarte a la realidad de un dia como el que en aquel momento se presentaba, mis animos estaban por los suelos y mi autoestima no estaba a tope como solia estar, vaya tonteria, todo habia comenzado con la simple razon de que, no habia logrado consiliar el sueño la noche anterior y me habia quedado leyendo cartas de tiempo atras.
Habia cojido el telefono y le habia mandado un texto a mi hermano, esperando me respondiera, sin embargo no lo habia hecho....

Estaba situada no muy lejos del borde de la azotea, oculta detras de diversas bancas viejas, ahi podia estar en paz, sin la necesidad de dar explicaciones a personas poco gratas o de mostrar la cara de Cristhine Dickens con el ego a la novena potencia. Escribia en un cuadernillo pequeñas anotaciones referidas a diversas ideas que me llegaban a la cabeza, palabras absurdad, garabatos en las esquinas del cuaderno, mi nombre, firmas tontas.... todo adornaba la fina hoja del cuadernillo.

Ante aquellos actos poco prestaba atencion a lo que sucedia a mi alrededor por lo que la presencia ajena no me hizo algun ruido y mucho menos preste atencion, no fue hasta que mi nombre salio a flote y volo suave hacia mis oidos cuando eleve la mirada, conocia la voz, fu!. vaya que la conocia, pero estaba pidiendo no fuera él.

Me puse en pie mientras le escuchaba hablar y no tarde en quedar a su vista, mas él aun no me percataba por lo que con un tono suave y serio me exprese.

No deberias invocar a los muertos Kenneth Ludge, aqui los fantasmas bailan a tu lado y las arpias y teatreros rondan el lugar...

Claro, me referia a él con la ultima palabra, pero que mas daba, me aproxime hacia la reja y me quede mirando hacia abajo, encontrando diversos puntos que eran si bien personas caminando por los jardines.

No ha cambiado en nada el lugar, no te has perdido nada nuevo realmente... Los caballeros simplemente, hicieron gracia de su nombre y calleron ante las finas damas... Es patetico escucharte melancolico Ludge, despues de todo... crei que habia escapado...

Rei un poco y no mire a mi acompañante, si bien era en cierto punto, grato, notar que habia vuelto, pero al mismo tiempo no podia siquiera tratarle como tal vez alguna ocacion lo hice, despues de todo... Habia comprendido que era mejor esconder cualquier especie de sentimiento, que no fuera sano para mi vida y Kenneth Ludge, representaba mil sentimientos poco sanos en mi....

*Mi corazón dio un salto al momento de escuchar aquella voz, apreté un poco fuerte mi mandíbula y seguí con los ojos cerrados, esperando que hubiera confundido aquella voz con el simple ulular del viento pero al escuchar los pasos que se acercaban y tras esto, de nuevo aquella voz, di un pesado suspiro y continué en mi posición.*

[Tal vez el invernadero no hubiera sido tan mala idea...]

Isabelle Dickens... quien diría que te encontraría aquí? Vaya... vaya... Que pena lo de mis "compañeros"... espero al menos hayan caído de una buena forma... y si no, igual poco me importa... *Abrí los ojos y saqué una moneda de mi bolsillo, es lo único que quise... o más bien, pude conservar de aquel viaje. La coloqué entre mis dedos de mi mano diestra y empecé a jugar con ella.* Melancólico? Acaso notas algún tono de melancolía en mi voz? *Lancé la moneda al aire y la atrapé con la otra mano comenzando de nuevo el juego. Seguí mirando aquel objeto sin mirar en ningún momento a mi acompañante*
Creíste que te habías escapado? De qué? De mi?

*Bostece un poco y me recosté en el piso dejando la moneda equilibrada en la punta de mi nariz mientras miraba el cielo nublado. Encontraba ese momento algo irónico, hace poco pensaba en ella, encontrármela... y ahora no sabía que hacer. Podía notar un poco su indiferencia en sus palabras, algo común en ella, las veces que hablamos trataba de mostrarse fría, pero esta vez era diferente... había algo más ahí. Sin saber que pensar o decir, preferí quedarme callado en espera de que ella comenzara a hablar*

¿Escapar de ti?... porfavor... no necesito escapar de ti, me referia a que el gran Ludge habia escapado de aqui... crei que no volverias, ciertamente, esperaba no lo hicieras.

Gire con calma sobre mis talones y camine en silencio por el lugar mientras el viento se colaba por mi cabello y lo hacia ondear con suavidad. observaba con calma los diversos sitios que se mostraban desde mi postura hacia abajo, las canchas los jardines, todo lo que versailles podia ofrecernos, acomode mi vestido con delicadeza, no solia estar en la azotea desde que las rosas dejaron de hacer reuniones, al menos no en tiempos tan largos, usualmente lo hacia solo cuando me sentia algo distante de lo demas.

¿a donde fuiste?

pregunte de golpe mientras seguia con la mirada lejos de la de él y caminaba con calma como un animal rondando a su presa, no esperaba si bien alguna respuesta que no fuera algo como "que te interesa" ó "acaso te importa?" tsk.... no debi haber dicho eso... ciertamente no me interesa en lo mas minimo lo que el pudo haber hecho o a donde pudo haber ido, los problemas del colegio son mucho mas importantes que algo tan tonto como un sujeto que desaparece de pronto

Me detuve y gire la mirada hacia la espalda de el, pues me posaba detras suyo y me quede un instante asi para mas tarde volver a mi caminar